¿Como elegir el casco adecuado?
Todos sabemos que el casco es una pieza muy importante en el equipo de seguridad que utilizamos para montar en moto. Pero no todo el mundo entiende que los cascos hay que cuidarlos convenientemente y cambiarlos cada cierto tiempo para que mantengan sus cualidades intactas el día que nos haga falta que funcionen.
También hay mucha gente (por suerte cada vez menos) que no entiende que dos cascos de la misma talla pueden ser completamente diferentes entre si a la hora de ajustar sobre nuestra cabeza. Y que si el casco no encaja bien con nuestra fisonomía puede ser hasta peligroso en caso de accidente. Por suerte en Motorcyclist han publicado un interesante vídeo en el que nos indican unos sencillos pasos a la hora de elegir un casco.
La pega es que para seguir estos pasos hay que probarse el casco en persona, con lo que no sirve de mucho para compras por Internet, a no ser que tengas garantizada la devolución en caso de que no te encaje.
De manera resumida los pasos son: primero medir el contorno de tu cabeza, para con esa medida ir a las tablas de conversión de cada marca y averiguar que talla usamos. El punto máximo de nuestra cabeza se sitúa sobre nuestras cejas y pasa por la parte superior de la nuca. Como truco, podemos utilizar una cuerdecita para averiguar nuestro perímetro si no contamos con una cinta métrica flexible. Una recomendación del vídeo es que si tu medida está entre dos tallas elijas la más pequeña.
También tienes que tener cuidado a la hora de meter la cabeza en el casco, porque algo tan sencillo mucha gente lo hace mal. Primero se apunta con la frente dentro del casco y este se desliza, girando, sobre nuestra cabeza. Aquello de meter la cabeza recta y por las bravas, no es buena solución y puede hasta causarte alguna lesión.
Con el barbuquejo abrochado el casco no debe salirse, y los movimientos permitidos sobre nuestra cabeza no deben ser muy grandes. Si el casco se mueve libremente con tu cabeza dentro mientras estás parado, imagina cuando te pongas en marcha con la moto.
Por último, al quitarte el casco debes buscar los puntos sobre los que aprieta en tu cabeza. Si en un rato puesto te marca las mejillas o la frente, imagina si lo llevas puesto una hora rodando por ahí. Pero no te pases eligiendo una talla muy grande porque tampoco es lo que necesitas. Recuerda que una talla demasiado grande se moverá, e incluso puede salirse de tu cabeza en caso de accidente.